Es jueves. (yuhu ¬¬).
Recuerdo las conversaciones que he mantenido estos últimos días. Me sorprendo y me abrumo. No entiendo nada. Como siempre, nunca entiendo nada cuando se trata de la falta de ruido, del no hablar por escrito, del reprimir las pasiones, de las pausas larguíssimas y las no tan largas, de la abstención de hablar. El silencio nunca fue especialmente mi amigo. Pero al parecer así tiene que ser.
Poetas. Dicen que son poetas y tan solo son demagogos de su tema. Hablan, hablan y hablan y curiosamente te convencen, te lo crees y te lo crees todo. Como siempre.
Marta siempre dice que por más palabras que puedas/quieras intentar transmitir/decir, ya sea con la cabeza bien firme o medio cabizbajo, se quedan en eso, palabras. Que sí, que pueden ser recuerdos, pero ya está. Que las palabras se las lleva el viento y que lo que realmente cuenta son tus actos y tus acciones; todo lo que haces y también todo lo que no.
Y lo haces. Tú lo haces. No sabes en realidad la razón, pero lo haces, te desplazas y vuelves a bajarte los pantalones por vigésima vez. Pones las cosas lo más fácil posible. Y nada. Nothing de nothing. Como siempre.
Es gracioso. Es cierto que las personas nos creemos que el camino más fácil siempre va a ser el más divertido cuando en realidad no es así. Aseguro que lo más complicado, lo que más te saque de tus casillas, lo que más te cueste y lo que menos puedas controlar, eso, será lo más fantástico, maravilloso e inquietante de todo el día, de toda la semana, de todo el mes o de toda tu vida.
Pero na'. La verdad es que te cagas. Porque es eso, no lo puedes controlar. Y te revienta.
Y ya ves, fíjate en los políticos. Me llama la atención que precisamente este tipo de cosas que pueden ocurrirte a ti y a mi, a nosotros y a todos vosotros, también les ocurre a ellos. A su manera, pero les ocurre. Que así no se solucionan las cosas. Que así no se soluciona nada señores. A ver que os pensáis.
Que inocentes que somos cuando nos creemos 3 palabras. Tres, cuatro o las que sean. y no entiendo nada. ¿Me lo explicas?
(Como siempre).
Y lo haces. Tú lo haces. No sabes en realidad la razón, pero lo haces, te desplazas y vuelves a bajarte los pantalones por vigésima vez. Pones las cosas lo más fácil posible. Y nada. Nothing de nothing. Como siempre.
Es gracioso. Es cierto que las personas nos creemos que el camino más fácil siempre va a ser el más divertido cuando en realidad no es así. Aseguro que lo más complicado, lo que más te saque de tus casillas, lo que más te cueste y lo que menos puedas controlar, eso, será lo más fantástico, maravilloso e inquietante de todo el día, de toda la semana, de todo el mes o de toda tu vida.
Pero na'. La verdad es que te cagas. Porque es eso, no lo puedes controlar. Y te revienta.
Y ya ves, fíjate en los políticos. Me llama la atención que precisamente este tipo de cosas que pueden ocurrirte a ti y a mi, a nosotros y a todos vosotros, también les ocurre a ellos. A su manera, pero les ocurre. Que así no se solucionan las cosas. Que así no se soluciona nada señores. A ver que os pensáis.
Que inocentes que somos cuando nos creemos 3 palabras. Tres, cuatro o las que sean. y no entiendo nada. ¿Me lo explicas?
(Como siempre).
¿Sabes? Mejor asi. Nothing de nothing. Solo falta que te des cuenta de ello. Porque reconoceras que Marta aqui tiene razon. Palabras son palabras. Y si no ha habido una actitud, un movimiento...solo quedan las palabras y el hueco en tu corazon.
ResponderEliminarAunque quizas hablo sin saber..