Cuando mirarse el ombligo resulta más una obligación que un pasatiempo. Cuando mirarse el ombligo es realmente necesario e indispensable.
Marta siempre dice que mirarse el ombligo está mal, que hay más mundo ahí fuera pero sabéis ese momento en que te das cuenta que a lo largo de toda tu vida no te lo has mirado lo suficiente?
Pues eso.
1 comentario:
¿Ese es tu ombligo? Yo juraría que no! ¿Porque?
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