domingo, 10 de julio de 2011

Menuda mente la de Marta.

Caminaba por las iluminadas pero oscuras calles estrechas del gótico. Era tarde y en una de las esquinas sonaba una guitarra en su estilo más acústico, dando melodía al paseo entre amigos de esa noche. La conversación fluía, los silencios eran adecuados y parecía que lo común y cómodo iba a apoderarse de la situación. Todo correcto, a veces poca profundidad y otras lejos de lo superficial, el rato pasaba.
Es como uno de esos momentos que te parecen eternos en los que de repente no sabes qué decir, ni qué contestar porque lo único que se te antoja es el frío de esa pared. Y es entonces cuando te viene a la mente trocitos de instantes como este:

"Y cuando la penumbra se apoderó de la situación, esas paredes frías ansiaban su fuerza y su desgarro, y así sentir la inmensidad de ese deseo constante que posiblemente sólo era producto de su imaginación. Aquella esquina perdida entre rincones estaba a punto de observar las ganas de la noche, el deseo del pensamiento y los suspiros incontrolables que iban a salir de ahí. Y fue entonces cuando le miró, lo acercó a ese muro helado sin avisos ni pretensiones y le hizo partícipe del descontrol más ansioso jamás imaginado. Ahora, no iba a detenerse  y sin duda, las manos ajetreadas tenían una avance despiadado. Un encuentro fortuito, eternamente lento, rápidamente pasional y estrepitosamente sexual, había dominado su pensamiento. Pero él, jamás lo sabría."

Marta siempre dice que la mente, en ocasiones, puede asustar, así que reduzcamos todo al silencio y al dejarse llevar. 

sábado, 9 de julio de 2011

#sábadodelimpieza

MeloKa&ClaRa
Haciendo una pausa en este sábado de limpieza de hoy. La música no ha parado de sonar en toda la mañana y es que parece que bailando se pasa mejor el aspirador. 
Hoy hace sol veraniego, brisita estupenda y no hay ni una sola nube en el cielo, pero me apetecía quedarme esta mañana aquí en casa, aprovechando que estoy sola, para hacer lo que me venga en gana. Y si quiero barrer en bragas y cantar como una loca, pues que nada me lo prohíba. Veremos a ver qué depara esta tarde/noche.

Mientras, echando un vistazo a unas fotos en una de las playas de Riviera maya, me han venido estupendos recuerdos. 

Venga señores, buen sábado. A Disfrutarg!


(Canción del día: Whatever - Oasis)

TourEuropa11'

El trío de mexicanos se han ido de tour por Europa. Qué suerte la suya. A disfrutar por Amsterdam, Ibiza, Roma, París y Londres. 
Mientras, yo estaré por aquí, disfrutando del solecito, de la playa, de las buenas compañías y de las conversaciones interesantes. Porque Barcelona y alrededores, también es digna de unas buenas vacaciones.

viernes, 8 de julio de 2011

Momento gin tonic.

Definitivamente los gin tonics tienen algo especial. Vale, sí, no son dulces y tampoco es una copa que te invite a seguir bebiendo, pero sin duda refrescan y enriquecen el ambiente. Yo no se si será por las burbujas del anhídrido carbónico de su tónica o por las propiedades medicinales que dicen que tiene la ginebra, pero tanto combinando el agua tónica con una Bombay Saphire o una Hendrik's, parece que el resultado es extraordinario.

Hay veces en que todo empieza de la forma más curiosa. Es como en una de esas ocasiones en que vas a comprar lo necesario para una cena improvisada. Una sopa de melón que sin tener varias líneas de elaboración, de lo más sencilla, fácil y rápida, acaba teniendo un buen resultado, aunque no lleve fresas por encima.
Mientrastanto, una radio pone música a la velada de anécdotas curiosas, comentarios graciosos, llamadas sorprendentes y conversaciones de lo más directas. Y de repente, las teclas de un piano empiezan a sonar y te fijas en la rapidez de las manos que de forma muy resuelta pero algo entrecortada, tocan repetidamente una melodía conocida. Y es entonces cuando te preguntas, si verdaderamente ese dedo anular que tan bien toca ese mi, ese do o ese sol, puede manejarse de igual forma en otras situaciones. Y es que siempre he dicho que el piano me encanta, me gusta cuando suena, intenso, fuerte y prolongado, rítmico y armonioso.

Esa melodía consigue llevarte a paseos de noche, con viento, aire, fuerza en la cara y en la piel; rápidos, seguros y majestuosos. Sólo te hace falta un vaso de agua, una palmadita en el lomo y una mirada deseosa para descubrir que cualquier cicatriz en el cuello coordina perfectamente con lunares cerca del ombligo. Tranquilidad, confianza, una sonrisa y todo tan sencillo como se quiera que sea.
Marta siempre dice que los pensamientos más chocantes, sobretodo los más extravagantes, acaban siendo los más singulares y son precisamente esos los que hacen que historias como éstas sirvan para divertirse y deleitarse.

¿Y sabéis qué? no hace falta que sean amargas, ni burbujeantes, ni siquiera medicinales como un gin tonic, eso sí, siempre te refrescarán, te enriquecerán y disfrutarás con ellas. 

jueves, 7 de julio de 2011

8, 9 y 10 de julio.

Vale, no tengo una, ni la voy a tener nunca. Además, no es que sea una aficionada innata pero es la primera moto con la que recorrí Barcelona de noche y por eso la hace especial. Así que este fin de semana voy a ir a verlas.