martes, 21 de diciembre de 2010

El Gordo.


Y hoy, día del cumpleaños de mi padre, toca lo mismo de cada año:

"Igual mañana, nos hacemos millonarios".


miércoles, 1 de diciembre de 2010

(...)



Siempre decimos que ésta será la última vez,
per
o nunca lo es.

martes, 30 de noviembre de 2010

La claridad es tan clara que al final, te acabas liando.

Cuando llegas a una edad, y no, no hablo precisamente a mi edad, ni tan siquiera de la edad de Marta..., no, no; me refiero a edades superiores (que tampoco tanto), cuando se supone que la experiencia, la vida, los años y el paso de tiempo te han dado la sabiduría máxima para poder afrontar cualquier situación, resulta que ni todos somos tan perfecto, ni tan buenos, ni tan extraordinarios para según que cosas.

Nos liamos. Nosotros mismos nos liamos solos, y es que según nuestro yo interior, todo está claro claríssimo. Pero no es así. Muchas veces, por dejarnos llevar por la senda de la vida, perdemos el norte, el sur, y hasta el este u oeste. Todo uno mismo se equivoca y ya lo dicen, para aprender, hay que equivocarse. Pues así sea. Pero quizá llega una mañana es que te levantas, te vuelves a mirar al espejo antes de entrar a la ducha y te sientes perdido. Sin quererlo ni beberlo estás en embrollos que ni te van, ni te vienen y que ni siquiera sabías que había la posibilidad de estar en ellos. Pero estás. Allí estás tú, a las 7:00 de la mañana, mirándote al espejo y dándote cuenta que los jaleos vienen como vienen. Y todavía tienes que desayunar antes de salir corriendo.
Las posibilidades son infinitas y no se puede ir de tonto por la vida ni dejándose llevar. Déjate de confusiones y/o ambigüedades. Cada uno debe llevar su propia vida.
Eso sí, si algún día nos vemos en situaciones confusas, no nos engañemos, evitemos rodeos e imprecisiones, centrémonos y plantemos (nos) cara y nunca intentemos arreglar en los demás lo que precisamente, uno mismo necesita. Y es que ya se sabe, siempre es más fácil todo en boca o piel de los demás que en uno mismo.

Hay que vigilar con todo. Con nosotros, los amigos, los compañeros, los desconocidos de la parada del autobús y hasta el vecino de la casa de al lado.
Porque, como dice Marta, ni los tontos son tan tontos, ni los sinceros tan sinceros, ni los legales tan legales, ni los claros, tan claríssimos.

domingo, 28 de noviembre de 2010

Dicen.

Dicen, que cuando no tienes inspiración para escribir es que nada te pasa en tu vida diaria, es que nada sientes en tus ratos libres y es que en nada piensas cuando caminas sola por la calle.

Dicen, dicen, dicen; Y si dicen, pues que digan, que al final, todo es mentira.

El mundo es tan tremendamente pequeño que se reduce a un pasillo del clínic.

Hay veces en que yo no me explico si realmente las casualidades de la vida son eso, simples coincidencias. O eso o es que nosotros las propiciamos favoreciendo al destino para que se produzcan.
No se, es extraño. Vale que eso de ser médico, estar en el mismo país y moverse de un lado para otro dentro de un radio de 2500 kilómetros puede ayudar, pero yo me sigo sin explicar eso de encontrarse en medio de un pasillo del Hospital Clínic una muy buena amiga gallega, con la que se había perdido el contacto, que te trae grandes recuerdos y.... sin quererlo ni beberlo, de repente, un día y sin avisar, os cruzáis en exactamente el mismo lugar, en el mismo momento y en casi la misma situación.

Es entonces cuando os abrazáis y todo el tiempo que os separaba, se reduce.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Y si...

Querida Marta,

"Y" griega y "si" son 3 letras que en sí mismas no suponen ninguna amenaza, pero si las colocamos juntas la una de la otra, podrían atormentarnos el resto de nuestra vida.
Y si..., y si..., y si...; no se como terminaría la historia pero lo que sí se es que sentiste un gran amor, porque nunca es demasiado tarde; si entonces fue tarde, ¿por qué no iba a serlo ahora? Sólo te falta valor para seguir a tu corazón. No se que se siente al amar como Julieta; un amor por el que se abandona a los seres queridos, un amor por el que se cruzan océanos; pero quisiera creer que si alguna vez lo siento, tendré el valor de aprovecharlo.
Marta, si tú no lo hiciste, espero que en algún momento lo hagas.
Con todo mi amor,
Clara.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Sorpresa revolucionaria.

Y mira que yo me pensaba que mi profesor de prácticas de cirugía no se enteraba de nada.... y mira por dónde, hoy, casi le ha faltado hacer un meeting. Que le das la mano, le tiras un poquito de la lengua y lo suelta todo. Menudo líder revolucionario de masas, señores. Si es que ya lo decían hace más de una década..., que los odontólogos, al final, no nos comeríamos un colín.
Me proclamo, odontóloga rebelde sin causa. O con causa. Ya ni se.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Superstar. Pero sin estrella. Con asterisco.

Un vestido negro, plisado, lazo al cuello y fucsia en el recogido. Así vi a Marta el otro día cuando la visité en su antigua residencia de verano del norte.
La llamé el domingo anterior para preguntarle que cómo estaba y que qué había sido de su vida en estos últimos meses.
Me dijo que había decidido tomarse un respiro, dar un nuevo rumbo a su vida y empezar a disfrutar. Que se había cansado de la monotonía de la vida diaria de estos últimos años y que además, después del incidente precipitado de aquella noche de 6 de junio, ya nada volvería a ser como antes. Que había visto correr toda su vida en imágenes en cuestión de segundos cual cuadros de museo a velocidad infinita. ¿Y sabéis qué? Todas esas imágenes no le habían gustado. Había visto lo desdichosa, infeliz, triste y escondida en si misma que parecía. Pero ahora, por fin había despertado.

Para mi, Marta siempre ha sido una superstar, una heroína de pies a cabeza, una pedazo mujer, mi amiga la que todo lo sabe y la que siempre tiene la razón aunque yo le lleve la contraria. Lista, profesional, seria pero desvergonzada en muchos de sus aspectos. Tabú durante siglos, pero que poco a poco se va realizando. Tierna, dulce y muy apasionada. Caramelo de miel. A veces, hasta abruma, pero que no cansa ni empalaga. Esa es Marta.

La vi algo decaída pero sonriente. Marta siempre sonríe; sonríe y ríe; suceda lo que suceda. Ella y su escudo interior. Me dice que no, pero yo siempre digo que aquellas personas con risa profunda, instantánea, abierta y directa son las más verdaderas, sinceras y espontáneas pero que al mismo tiempo, son personas que esconden un interior muy suyo, muy elaborado e incluso, demasiado racional. Es por eso que creo que me llevo tan bien con Marta. Porque soy todo lo contrario; Tengo sonrisa infinita pero risa silenciosa con mundo interno algo tarambana, muy desequilibrado y lleno de locuras.

Desde que conozco a Marta, ella siempre me ha aconsejado y ha estado para mi. Ahora, yo voy a estar para ella.

¿Eso hacen los amigos, no?





Superstar de asterisco, sin duda. Muy peculiar toda ella.

viernes, 29 de octubre de 2010

A la amiga más perfecta lingüísticamente hablando que tengo.

Es 29 de octubre. Joder qué rápido que pasan los días, las semanas, los meses.... la vida.
Y con todo esto de vivir sola, este blog se ha quedado solo solito. Tengo que volver. Necesito volver. Necesito de esos momentos de una misma, en los que escribes solo por ti y para ti.

Hace días que no veo a Marta. No se qué será de su vida. Un día de estos la llamo.
A la que sí que he visto es a mi amiga Montserrat. Sí, sí, la huevona que se fue y me abandonó en la asociación como única mujer activa... se fue a las Valencias en septiembre.
Ya se, ya se, le dije que le escribiría algo pasteloso y memorable, pero........, en fin, no tengo excusas. Lo se. La razón es que al parecer no he encontrado ni un segundito para sentarme y escribir. Y tengo que admitir que lo necesito.

A la Montserrat....
Que le vaya bien, que le vaya bonito, que disfrute, que aprenda, que haga locuras, que no se prive de nada, que se divierta, que explore, que conozca.... que se ría mucho y llore poquito. Y que me eche un poquito de menos. Pero solo un poquito.
Que sepa que es cojonuda y que todos esos valencianos (con perdón del Quim) que hacen llamar valencià a una lengua que me mezcla catalán con castellano, haciendo catalanismos y castellanismos a su son y que se sacan palabras de la manga, que sepan que ya está ahí la Montserrat para ponerles a caldo, que si en algo es EXPERTA la señorita en cuestión, es en la lengua.

Se que le va bien, pero le deseo lo mejor. Todo mucho mejor. Y que se le echa de menos.


Se't troba a faltar reina!
Viu, viu molt!

martes, 14 de septiembre de 2010

Enamoradiza.

De nuevo por la Plaça Sant Felip Neri.
Todos sabéis que me encanta. Ya lo he dicho alguna que otra vez. Ésta plaza, desde el día que la descubrí, me cautivó.

Y es que Barcelona esconde en pleno Barri Gòtic un espacio donde todo, absolutamente todo, se detiene en una milésima de segundo infinita. Un instante donde el sonido de los coches, las voces de la gente o el viento no se atreven a perturbar ese momento.
La plaza Sant Felip Neri es un sitio imposible en Barcelona, un lugar que se antoja de cuento de hadas en una ciudad de 1,6 millones de personas ajetreadas por el estrés del trabajo y de sus vidas. Aquí trasciende el espacio terrenal y se detiene el tiempo, siglos de historia inexorables.

Con sus cicatrices te lleva al momento que los impactos de metralla por la Guerra Civil Española perforaron las paredes de la iglesia o a los susurros de las victimas de los fusilamientos, cuando las fuerzas profranquistas tomaron Barcelona.
Y si indagas un poquito, hasta puedes llegar a la edad medieval, entre nobles. La plaza escondida ocupa los terrenos del antiguo cementerio medieval además de los antiguos gremios de caldereros y zapateros.

Magnífico. Magnífica.

lunes, 6 de septiembre de 2010

No puedo tener amigas.

Qué me han dicho que no! ¡Qué cojones! ¡Qué barbaridad!

"No puedo tener amigas guapas"

Esa ha sido la frase algo connotativa que me han dicho esta mañana mientras desayunaba un cacaolat bien frío. Y es que parece que esto de los cacaolats bien fríos con el señorito deluxe acompañados de mensajes profundos, se han convertido en algo substancial.

¡Pero que es estoo! No jodamos señores. ¿Es justo esto?
No. Obvvvvvio.
Y claro, si quieres ir a pasear, a la playa, a tomar algo o a reírte un rato con tu amigo, que está casado, divorciado, reajuntado y esperando ser padre, no se te permite porque su mujer no le permite tener más que amigas en común (feas y guapas), pero en común. Supervisión y control de las amistades por encima de todo. NO-JO-DA-MOS.

Y claro, para charlar lo único que te queda es hacerte la línea roja de metro dos veces porque al menos, en el tiempo de trayecto, puedes mantener una pequeña conversación.


¿Tú lo entiendes? Porque yo no.



Y mira que yo siempre fui "la amiga de la guapa".

Hablando del huerto...frutas, hortalizas...

- ¿Y yo, qué producto del huerto sería?

- Yo creo que tú serías.... Un racimo de uva. Uva de la vieja parra. Que hay que cuidarla con esmero, dejarle sitio, ofrecerle sol, agua en su justa medida. Y esperar. Porque solo ella dice cuando es el momento de recogerla. Y después, desgranarla, uva a uva, disfrutando de sus diferentes matices; mas grande, mas pequeña, mas impregnada por el sol, mas ácida. Te acompaña en los días de octubre, cuando el alma necesita mas consuelo endulzando tus comidas. Y si trabajas bien la vid, puedes cosechar vino, que para el que le gusta, e incluso en la mitología, es bebida de dioses.



¿Y tú, qué serías?

lunes, 30 de agosto de 2010

4sq.

Después de mis 100 días en foursquare y habiendo pasado los 500 check-ins, como que una se siente más.... ¿Realizada?
Nah, realizada no, pero es divertido y curioso cuando te das cuenta que hay gente que de verdad se cree que hay un mundo a parte en el 4square. Es como un mundo paralelo. Un juego de competir para ver quién se hace con más lugares que visita. Parece una chorrada, pero engancha señores, vaya si engancha.
¿Y ahora sabes qué? Van a sacar un Monopoly al estilo foursquare.
Curioso, no?

Yo mientras tanto, me conformo con las chapitas que ya han puesto a la venta en la Store de Foursquare.

Y con seguir consiguiendo Mis Insignias. Como Russell, el niño de Up.

A lo exploradora intrépida!

domingo, 29 de agosto de 2010

29.

Y agosto casi terminó. Sin haber hecho gran cosa, he hecho de todo. Palafolls, Blanes, Low cost festival, Bilbao, Molins... y algún que otro lugar secreto. Gran verano.

jueves, 19 de agosto de 2010

Reflexiones.

Entre la referencia y la interferencia hay solo un paso. Un reloj, una sonrisa, una mirada, un gesto, la calidez y luego, todo lo demás...silencio. Las personas que de tan sencillas que somos, parecemos hasta complicadas. Todo se enfría y todo se calienta. Todo es nada y de nada, un mundo. Así somos algunos y así seremos. No hay vuelta atrás y nada puede cambiar. Tenlo claro. Tenlo por seguro.

martes, 10 de agosto de 2010

Tierras del norte.


¿Cuándo has tenido que moverte 3 veces mientras tomas el sol en la playa porque si no el agua del mar te pone chorreando? Nunca, excepto esta vez.
El cantábrico es lo que tiene, las mareas, que tocan los cojones un rato.

Me quedo con todo, con las playas, con los pintxos de queso y arándanos, con las noches lluviosas, los días soleados, los callos de mis manos por ser una principiante en piragua, con los atardeceres en naturaleza, con los ambulatorios que ponen musica en català, con la frase "ir al monte", con todos los abuelitos que te indican hacia una dirección cuando en realidad el lugar que buscas está hacia la otra, con las calles del casco antiguo de Bilbao, con el paseo por alrrededores de Guggenheimm, con el olor a hierba acabada de mojar, con el puente colgante, con los pueblecitos de pescadores y con los castillos de príncipes y princesas.

viernes, 16 de julio de 2010

Es verano y se nota.

16 de Julio. Casi 17. Menudo mes. Que sin darme cuenta ya ha pasado la mitad y yo en mi mundo habitual.

Resumiendo, este mes ha sido un despiste por completo. Empezando por llamadas al movil que suenan pero que no oigo, siguiendo con varias celebraciones de las que me he acordado pero que no he felicitado (véase cumpleaños de mi tío Jordi, cumpleaños de Javier, santo de mi madre....).

Y mira que ha hecho sol. Cojones si ha hecho sol... una barbaridad! Y el único día que tendría que haber hecho sol para alegrarme la mañana, va y se nubla. Tenía que coincidir con mi ida y venida al aeropuerto. Es que el cosmos no podría estar más en mi contra.
Aunque esta vez el olor a México se ha quedado más adherido a mi almohada que de costumbre, y cada rincóncito de Molins guarda una pequeña esencia. En septiembre todo vuelve, y él, con todo ello.
A pesar de eso, hay una noticia, una GRAN noticia. Dos amigos (muy amigos) míos se han ido a vivir juntos. Sí, sí, a todo eso de las discusiones por las lavadoras, cómo hacer la cama, cómo doblar la ropa, fregar platos, hacer comidas, barrer...., en fin, todo eso. Y sabéis que, a mi me encanta porque redecorar una casa es genial :)

En fin, las cosas van bien, está siendo un buen julio. La playa, las piscinas, el gimnasio, la lancha del Torrecillas, las calitas desconocidas, los viajes, las noches en la terracita, los primos, la wii, el lowcostfestival, las visitas insospechadas a Molins, los amigos, las cartas del UNO, los helados caseros de sandía.... vamos, todo eso... es el VERANO, las vacaciones.

miércoles, 7 de julio de 2010

[delux]

Mira por dónde.

Tienes un amigo con el que hablas de dientes, tríos, orgías, borracheras varias, fiesta, rock'rol, morbo, algún que otro engaño, separaciones, reconciliaciones y de la adrenalina que te da la vida cuando haces cosas que quizás no deberías hacer pero que el cuerpo te las pide.
Es un amigo del que vale su amistad. De hecho, me vale mucho la pena ser su amiga (o tenerlo como amigo). Es divertidísssimo. Mola. Es algo perturbado, desequilibrado y trastornado (no él, si no la vida). Me encanta porque su risa te hace reír a carcajadas y eso es lo mejor.

Y joder, sin que te lo esperes, así de repente, después de haberse separado y reajuntado, te dice con los ojos vidriosos y una sonrisa de oreja a oreja mientras tomas un cacaolat que va a ser padre. JODER (sí, sí, joder seguro que ha jodido, pero no me refería a ese joder).

Y cuando me lo ha dicho no sabía si felicitarle o darle el pésame. Es que me cuesta verlo dando biberones, qué queréis que os diga. Supongo que va a tener que empezar a acostumbrarse a eso de cambiar pañales y dar potitos. ¡Qué fuerte!
Vamos, que parece que va a tener que dejar de lado un poquito a su potro querido para pasar a ser el papá calvito morboso sin potro.

¡Felicidades champion!
Cómo él diría: DE LUXE.

viernes, 25 de junio de 2010

¿Estamos locos con foursquare?

Sí.

Algunos de los que me conocen habrán oído de mi la frase de "algún día, las nuevas tecnologías nos van a comer".

Hace un rato me he proclamado alcalde de un nuevo sitio en Foursquare. Ya es el décimo lugar de donde soy Mayor. Tengo la nueva chapa de SuperMayor. ¡Perfecto!
Y os preguntaréis, esta tía de qué está hablando!?
Todo empezó cuando un día, mi tío escribió en su blog acerca de una nueva red social para compartir tu ubicación con tus amigos (http://elcrosto.blogspot.com/2010/04/va-comencar-amb-forca-als-estats-units.html).
No tenía ni idea de lo que se trataba pero como siempre me apunto y me subo al carro de todo lo que él dice acerca de estas cosillas, ahí que me fui.

Lo cierto es que, por ahora, no tiene una finalidad, ni objetivo especifico, que es lo más tonto del mundo y que la única función que se le puede encontrar, son los tips (comentarios cortos) . Te dan y das opiniones de/a otros usuarios de los lugares donde has hecho check-in, y por tanto, visitado.

Vale, llamarme geek.

Digamos que a todos nos encanta la competición. No hay razón lógica para utilizarlo. supongo que es el gustillo que te da la vertiente del juego y la competición por los check-in, la adicción de convertirte en alcalde de los sitios y el pique de puntos con los amiguetes.

Mis chapas molanmil.
:)

sábado, 19 de junio de 2010

Sin título. Fuera de serie.

Vas en el tren y sientes que llegas tarde. Esperas reunirte con alguien con el que has quedado y cómo no, escoges Plaça Catalunya. Todo el mundo escoge ese lugar. Llegas y no ves al conocidamente desconocido. Hace sol, hay brisa y todo parece tranquilo pero estás algo nerviosa. Y una mancha verde se acerca, luego vislumbras unas gafas y te das cuenta que bajo ellas hay una sonrisa que nunca antes habías visto pero que te resulta familiar. Muy familiar. Y se acerca. Es él. Y su voz tiene un leve airecillo a norte. Te gusta. Y confirmas. Es él.

Un paseo por el Born y te topas con Santa Maria del Mar. Espectacular. Tengo que reconocer que el Born, nunca me había llamado la atención. Hasta hace poco. Lo había paseado alguna que otra vez, aunque siempre de paso y sin prestarle demasiada atención. Pero la arquitectura, formas y su ambiente, acumulan el encanto de una ciudad vieja con aires de ciudad nueva.

Y seguíamos caminando y la conversación seguía fluyendo igual que había empezado. Cual amigos de toda la vida. Fantástico. Fantástico y extraño a la vez. Y curioso, muy curioso.
Y para acabar, Plaça Sant Felip Neri. Caviar para los sentimientos. Un oasis en medio de la jungla. Y una tetería escondida entre la inmensidad de las calles del gótico. Asombroso.

Si todo el mundo dejara un poco de lado los prejuicios de vez en cuando, se daría cuenta que incluso días con tardes lluviosas como el de hoy, pueden ser algo extraordinario y perfecto. Que las miradas y las palabras compartidas hacen entenderse a cualquiera, incluso a dos almas con edades bastante divergentes. Y mira por donde, si una complicidad así hay que conseguirla de esta forma, escribiremos un pergamino y lo mandaremos en botella. Vale la pena.
Y no me preguntes de qué hemos hablado ni en qué sentido ha ido dirigida la conversación porque no puedo resumirlo. Ni yo lo se. De todo, de la vida, supongo. Pero no ha habido ni un solo silencio, porque esta vez, no hacía falta.
Bichos, fibromialgia, amistad, familia, amores pasados, presentes y futuros, reflexiones, dinamita, odio, culpa, locuras, lentillas, tecnología, rapidez, sonrisa. Decirle que no cambie nunca, que mola, que es guay y que aunque yo haga mejores fotos que él, es fenomenal. Que conocer a personas así no sucede todos los días y que la especialidad marca la diferencia. Pero él, eso, ya lo sabe.


Parece que todos tenemos el impulso de rellenar espacios de nuestro interior que surgen abriendo paso a un mundo que no siempre acepta lo diferente. Pero no siempre lo conseguimos. Tardes como la de hoy, los llenan, rellenan y encima, rebosa.
Vamos, que se salen.

viernes, 11 de junio de 2010

Llámame llorona.

Una película, un momento, un pensamiento, un sentimiento, cualquier idiotez que suceda. Algo que te ponga más sensible de lo habitual.
Días como hoy en los que llueve y sale el sol. Vienen chaparrones como ráfagas de aire y luego se van. Ya lo dice el dicho, después de la tormenta siempre llega la calma, pero hoy parece que es al revés, o que al tiempo le ha dado por ponerse en modo aleatorio, se nubla, sale el sol, llueve, sale el sol, se nubla, chaparrón, se nubla, llueve, sale el sol.

Lo que decía, que cualquier cosa de éstas me pone sensiblona a mi. Y como yo soy de lágrima fácil, pues ahí que voy.

Más que Marta y todo, lo suyo son mas las lágrimas de cocodrilo.

miércoles, 9 de junio de 2010

Tot nou.


A partir d'avui el meu tiet (que és qui s'encarrega d'aquestes coses) pot fer el post del nou iPhone i
les seves noves prestacions, l'homofonia tan peculiar del seu nou sistema operatiu, les seves mides, la seva nova pantalla retina i el nou mètode d'antena generalitzada.

A veure què diu; però ell és més com jo, d'Android.

domingo, 6 de junio de 2010

De mentirijilla.

Hace mas o menos dos meses que estoy aquí definitivamente. En realidad nadie lo sabe, todos creen que vengo y voy a mi voluntad, pero hay algo que confirma cuando alguien se ha mudado. Hay quién encuentran la señal en el cepillo de dientes, hay quién lo encuentra en el libro de lectura en la mesita de noche o hay quién lo ve en las zapatillas de estar por casa. Cada uno tenemos nuestras señales y la mía está en el zapatero; sí, sí...., si el zapatero está más lleno que el de mi casa, es que ya me he instalado completamente en Molins. Rotundamente.

A pesar de iniciarme en el mundo de las lavadoras, fregar algún que otro plato, encontrar moníssima una plancha de color verde o hacerme amiga del limpiacristales, aún no soy consciente que me he independizado.
De eso me di cuenta ayer, cuando un par de amigos muy amigos míos me dieron el notición: "Nos vamos a vivir juntos". Vamos, piel de gallina y todo. Que queréis que os diga, a mi estas cosas me estremecen. Y luego me pongo a pensar y me digo: "coño, pero si hace tiempo que yo vivo fuera de casa."

La diferencia es que yo no compré el sofá, ni la lavadora, ni la mesa del comedor, ni la cama de matrimonio y ellos si lo van a hacer. Por eso digo que lo mío es de mentirijilla. Y lo suyo, cómo la vida misma.

Mis mejores deseos para ese par de dos :D

jueves, 3 de junio de 2010

Surrealismo.

A los dentistas no deberían pasarnos estas cosas. Cómo es posible!... pues sí señores, mañana me van a extraer un diente y a poner un implante. Tiene guasa. Y todo por comer pipas.

Exámenes a sus cuarenta y cincuenta y tantos.

Vaya, vaya, vaya. Al parecer se ve que esta en auge eso de hacer cursos. No se exactamente si es la seguridad social, si es el convenio de empresas que lo obliga, que tanta gente esté en paro o otra de las peripecias de comisiones obreras. Pero lo que sí es verdad es que tengo a tres miembros de mi familia estudiando de nuevo. Ahora, a sus cuarenta y tantos y cincuenta y tantos, tienen que volverse a sentar frente a un dossier de apuntes (eso sí, un poco cambiado a lo que ellos estaban acostumbrados; todo a ordenador, encuadernado, sin libretas a cuadros y a veces, hasta a distancia). Tienen que volver a sus años mozos, cuando hacían exámenes. Es gracioso ver a mi tío que llega con su carpeta bajo el brazo, su lápiz, su bolígrafo y su dossier y me dice: "Acabo de llegar de la uni". Y que venga de hacer su examen y me diga: "Estaba chupao". Me hace gracia, qué queréis que os diga.

O que ayer me enterara que mi tía está haciendo también un cursillo, junto con sus compañeras de trabajo, de esos a distancia y que con todo el jaleo, se abrume (que no estrese) al pensar en todo lo que tiene que aprender a hacer y además, compaginarlo con su vida actual, de trabajo, niños, casa, marido y vida social. Puf. Me estoy estresando yo y todo. Porque yo SI que me estreso, no como mi tía, que ella NO se estresa; NUNCA se estresa ;)

Y luego está mi padre, el más calmado de todos, que lleva 2 semanas con el dossier encima de la mesa de la oficina y que por olvido, falta de tiempo, o pereza, no ha empezado a leerlo. Que feliciano. Y le preguntas y te dice "no, si yo todavía tengo tiempo". Vamos, que fijo que mi padre era de esos que lo deja todo para último momento.

En fin, que ya veis, yo de exámenes y ellos también. Curioso.

miércoles, 2 de junio de 2010

Mensajes en botella.

Vaya, es miércoles. Antes me encantaban los miércoles. Digo antes porque es antes refiriéndome a antes, antes; antes cuando la Clara iba al cole. Me acuerdo que durante toda la vida los miércoles molaban. Era el día en que había créditos variables dónde nos reíamos a más no poder, era el día que tocaba plástica/dibujo y era el día de la semana en que para comer había sopa y pollo con patatas. Esto era lo más importante. Todos esperábamos el miércoles en el comedor. Era leyenda, pollo con patatas el miércoles. De toda la vida.
Ahora los miércoles son un día como otro cualquiera. Pero un miércoles como hoy, a mí me gusta especialmente. Ya empezó período de exámenes y nos estrenamos ayer, con cirugía. Hoy es el día post, digo, post-cirugía. Por eso me gusta. Es como cuando tienes algo dentro durante mucho tiempo y por fin lo haces. Te quedas descansado. Pues así estoy. En que apetece solecito de verano y un Nesquik con Krispies. Así he empezado el día yo, bueno, con mi tazón pero sin sol porque hoy se resiste a salir. Por ahora.

Hoy es día de mensajes. No es que tenga nada de especial pero proclamo los miércoles día de mensajes en botella.
El otro día, en conversaciones que no hace mucho mantengo con un tipo interesante, hablé del tema. Las personas somos como náufragos, como personitas perdidas en una isla (perdidas que no Perdidos). La isla de la vida. Es grandiosa una comparación como esta. Siempre he pensado que las personas somos como náufragos de la vida que tenemos momentos en los que esperamos que alguien nos mande un mensaje. A ti, a mi, a todos nos gusta, nos encanta recibir mensajes. Esperamos (o no) a que una botellita con un pergamino en su interior llegue. Sí bueno, a veces son mensajes como un papelito en la nevera que pone “ves a comprar el pan”. Pero yo no hablo de ese tipo de mensajes. Ya sabéis de qué tipo de botellitas hablo. Y si encima la botellita es verde, pues mejor; más peliculera.

Nos gusta recibir mensajes, porque cada uno de ellos significa que alguien se acordó de ti, que alguien espera contestación tuya, que alguien te quiere, que te odia, que te aprecia (o que no), que le haces reír, que le diviertes y que le importas.

Veis, a todos nos gusta recibir mensajes. A Marta también, no os penséis.

sábado, 22 de mayo de 2010

Hablando nos entenderemos.

Vaya! Es sábado.
Sábado y como si fuera viernes. Fiesta de lunes. Hace sol y desde la terraza, alargando la mirada por encima de Sant Feliu y todos los demás pueblecitos que se vislumbran desde aquí, casi puedo ver la línea de mar. Es verano. no, no lo es pero lo parece. Mi libro de cirugía sigue ahí expectante, con unas páginas de más o unas de menos, pero ahí está.

Esta semana no he visto a Marta. Llevo días sin ver a Marta y eso me preocupa un poco. Creo que se ha enfadado conmigo. O no, quién sabe. No me ha dicho nada y no se exactamente si ha sucedido algo; pero no he tenido noticias suyas y me ha contestado con un aire algo sarcástico e irónico alguna que otra vez. Si nos ponemos a mensajes subliminales, creo que se qué decirle a Marta.
Le explicaré la historia que mi abuela me ha contado alguna que otra vez. Bueno, bien, igual la historia no se la cuento porque es un poco larga pero tiene moraleja (como todo lo que dice y cuenta mi abuela).

La comunicación. Comunicarse, decirse las cosas de frente, hablar, mantener conversaciones largas, cortas, intermedias, charlar, expresarse y dar tu punto de vista. Las cosas no siempre son igual ni todo el mundo las ve del mismo modo. Incluso es posible que sean visiones totalmente controvertidas. Por eso, compartir palabras es la mayor solución aunque a veces no por eso deja de ser la más complicada. Y cuando hables, ponte en el lugar de lo que te están contando, de la persona que tienes enfrente y todo será más sencillo. Y si en algún momento ves que tienes que dar tu brazo a torcer, por muy ilógico que te parezca, pues lo das. Que remedio. Pero ha de ser bilateral. Así todo se entenderá mucho mejor. Muchisssssimo mejor. De veras.

Nos evitaremos (todos) películas absurdas.

domingo, 16 de mayo de 2010

Curiosity killed the cat.

Me han llamado "tía curiosa" y aún no encuentro una explicación adecuada para poder entenderlo y asimilarlo bien. ¿Qué abarca y qué significa exactamente ese adjetivo refiriéndose a una persona?

¿Intrigante, extraña, rara, diferente, poco habitual?
¿Descubridora, soñadora, creativa, buscadora de respuestas?

Creo que la curiosidad es lo que nos lleva a desarrollar el conocimiento y nos hace questionarnos sobre todo lo que nos rodea y así, buscar respuestas. Nos ayuda a ser más ambiciosos y eso es bueno. A las personas nos llaman la atención muchas cosas, somos curiosas por naturaleza, y quien diga lo contrario, miente. Queramos o no es innata. Hay veces que nos aporta cosas positivas y otras negativas, pero todas ellas nos generan valores para la vida.

Y bueno, luego....., luego está lo de "La curiosidad mató al gato", algo que no tiene nada que ver directamente pero que es una expresión que yo uso muy a menudo. Me hace gracia y a la vez encuentro que le da sentido a muchos momentos. Que queréis que os diga, me define. Tengo que reconocer que hay instantes en los que debería detenerme y decir: "ya está bien Clara". Marta siempre me lo dice. Ella siempre me dice que quizás un día el gato muera por ser tan curioso. Muchas veces por querer saber más, destruimos aquello que estaba envuelto en el misterio, y la magia desaparece. Y luego, por no pensar las cosas, ya no hay marcha atrás. Y el gato ha muerto.

Cuidadín, cuidadín, que por querer saber más, nos daremos cuenta que todo lo que hemos descubierto es en realidad, una mentira.


A pesar de todo, tengo que reconocer que no puedo evitar ser curiosa. Pero curiosa de querer saber más. Porque el no saber, me vuelve loca.

lunes, 3 de mayo de 2010

¿De veras soy afortunada?

Buenos días.
Perdón. Buenos, buenos no es que sean, teniendo en cuenta que es lunes y que llueve.
Y eso no es todo, no, no. Hoy es uno de esos días en que crees que el cosmos te odia.
Ya desde por la mañana tu alarma del móvil que pusiste tan ricamente a las 11 de la noche de ayer, no suena y no porque no tengas batería; no suena porque en vez de poner a.m., pusiste 7:30 p.m. y lógicamente la alarma no ha imaginado que las 19 horas serian las 7 de la mañana.
Es que eso de a.m. y p.m. nunca fue lo mio.

La cosa es que te levantas corriendo porque ves que son las 8:15 y que a las 9 tienes que estar en la uni. No te va a dar tiempo ni siquiera de coger tu pollo con su vinagreta de miel y mostaza que te preparaste con tanto entusiasmo por la tarde. Porque ni encuentras el tuper, y si lo encuentras, ninguno de ellos tiene la medida suficiente para un muslo de pollo. Ahí piensas en que igual todos los tupers que le diste a tu madre para sacártelos de encima, no deberían haber sido tantos.
Entonces miras por la ventana. Llueve. ¡Mierda! No tengo paraguas y el corto recorrido hacia la estación del tren va a convertirse en toda una odisea. Tienes que vestirte y no encuentras los calcetines adecuados en su respectivo cajón. Corres. Acabas vistiéndote a trancas y barrancas y te das cuenta que la chaquetilla que llevas es demasiado larga para ponerte encima la chaqueta porque se va a ver por debajo y piensas: "Marta siempre dice que eso es de lo más hortera." Al final, te lo acabas poniendo todo porque el tiempo se agota y el tren se va a ir sin ti. Sales corriendo sin paraguas y sin pollo. Por fin llegas a la estación.

¡Mierda! Precisamente hoy los trabajadores de las RENFE se han puesto en huelga por razones absurdas. ¿Dónde van a meter 50 plazas de párquing bajo la estación de Sants? ¿Debajo de dónde, si está el metro?; ¿en el andén? En fin. Ya de buena mañana no podrían ir peor las cosas. Estás ahí, sin paraguas, sin tu pollo, con una chaquetilla y chaqueta combinando de lo más cutre y encima el tren no va a pasar hasta no se que hora. Sientes que tus calcetines que tanto te costó encontrar esta mañana se están mojando porque los botines que cuando los compraste te parecían de lo más económicos, no son ni mucho menos impermeables.


Menos mal que alguien me dijo que no conoce a nadie con más buena fortuna que yo.

:)

martes, 20 de abril de 2010

No se si me explico.

Creo que no nos hemos entendido bien.

Cuando hablé en la entrada anterior de la dignidad, hablaba de ella como concepto general, general y generalizado, no solo entre parejas, matrimonios u hombres y mujeres que se gustan o no. No, no, yo solo puse un ejemplo que "una mente experta" me expuso.

Sí, es cierto, es cierto que un hombre sin ser hombre ya no sería hombre (obviamente) y seguro que aburriría hasta la saciedad, pero, y quizás me equivoqué en emplear el término "hombría", no siempre eso es lo mismo a dignidad.
Cuando digo perder la dignidad no me refiero a perder la autonomía de uno mismo, ni perder la libertad, ni dejar de ser estrictamente racional o perder el poder de crear; Tampoco te digo que hagas lo más indigno del mundo.
Lo que yo quería decir es que en realidad, esa dignidad que tanto nos preocupa a veces (ya sea hombre o mujer) por el "qué pensará el otro/s", no tiene tanta función en si. Que las cosas hay que hacerlas si se quieren hacer, si apetecen, aunque sea lo más irracional del mundo (por eso dije estrictamente delante de racional).

Si quieres llamar, pues llama, si quieres sorprender, pues sorprende, si quieres dar un paso hacia delante, pues hazlo. La vida está para eso, para hacer tonterías. Lo único que puede pasar es que te limiten. Que la dignidad no la pierdes. Que yo soy muy digna y tú también. No te preocupes.



(Lee atentamente Don F.Dwarf)

viernes, 16 de abril de 2010

¿Y tú, tienes dignidad?

¿Qué es la dignidad señores?
¿Cuándo la perdemos?
¿Es indistinta entre hombres y mujeres?

Marta a menudo dice que la dignidad de cada persona únicamente depende de uno mismo y que hay ocasiones y personas por las cuales no importa perderla.

Una "mente experta" (comillas-comillas) dice que cuando las mujeres hablamos de estos temas, no tenemos ni idea de qué estamos diciendo, porque hay que tener en cuenta que hay una línea muy estrecha entre romanticismo y estupidez.

Cuando un hombre va a hacer algo que borre la línea entre esas dos cosas, la mujer ya ha decidido en qué categoría entra. Es decir, si el tipo nos gusta, casi cualquier gesto nos parecerá romántico y por tanto cualquier cosa, por muy imbécil y desastrosa que sea, habremos decidido que es lo más estupendo del mundo porque él nos gusta, nos encanta y moriríamos por él (bueno, esto último es relativo). En cambio si el susodicho nos disgusta, o peor aún, si ni siquiera nos interesa, un gesto tan típico como traernos flores nos parecerá pesado, acosador y ridículo. Déjenme decir que veo dudosa esa postura y no la comparto en su totalidad.

A decir verdad, creo que el hombre debería olvidarse de la hombría de la que con tanto orgullo presume.
Pero no, ellos siempre dirán que en el momento en que un hombre se olvida de su dignidad, ese hombre pierde todos los puntos (a menos que sean puntos de amigo, que son como puntos del Caprabo pero menos útiles porque con los de Caprabo te dejan entrar a la gala de los Oscars).

¿Es que para qué queremos la dignidad? Ah, sí, perdonen, que eso es lo último que nos queda (o eso dicen, porque es lo último que se pierde) cuando no nos queda nada más. ¿Qué pasa, que te van a juzgar por no tenerla? ¿Qué no vas a poder respirar si la pierdes?, ¿Qué no te van a dejar entrar en el cine?, ¿Qué te vas a morir sin ella? Menuda tontería. La dignidad no sirve para nada y si vale la pena perderla, pues de perdidos al río, hagámoslo.

Todos nacemos con la misma cantidad de dignidad. Yo creo que tengo un nivel de dignidad distinto con cada persona, con cada amigo que tengo me he concedido el privilegio a mi misma de perder un poquito más o un poquito menos porque total, para qué la quiero. No voy a ser menos ni peor por tener menos que tú porque en realidad tú siempre tendrás menos que Marta. Seguro. Porque sí, de todas las personas que conozco, Marta es la que se lleva el cupo de dignidad. Es que ella es muy digna. En todos los sentidos.

Yo la voy perdiendo a ratos, cuando soy tonta, cuando me pongo pesada, cuando doy primeros pasos, cuando soy curiosa, cuando me pongo melancólica o cuando hago las cosas sin pensar en las consecuencias. Pero esa es mi vida. La Clara sin dignidad sigue siendo la Clara, así que dejaros de pamplinas y haced las cosas si os apetecen, porque seas hombre o mujer, siempre, siempre, siempre, valdrá la pena.

jueves, 8 de abril de 2010

Los 80 de mi abuela.

La verdad, hoy me dan ganas de escribir acerca de las casualidades de la vida, pero no toca. Lo dejaré para la próxima vez. Mi abuela cumple años, la Mina llega a su 80 cumpleaños y eso, merece mención sí o sí.

Siempre se ha dicho que los mayores de la casa son la experiencia de la familia y a decir verdad, así es. Porque los abuelos no solo son aquellos que nos hacen los mejores macarrones del mundo, o los que nos vienen a buscar al cole, o los que nos llevan al parque después de merendar. Los abuelos son mucho más que todo eso; sin ellos, no estaríamos aquí. Y sí, tienen sus cosillas de la edad, pero es que crecen y se hacen mayores así que tampoco podemos quejarnos mucho porque seguro seguríssimo que cuando nosotros seamos abuelos, seremos igual.

Le deseo todo lo mejor y ojalá que yo con 80 años esté como está ella.
Porque la Mina, siempre será mi abuela marchosa.


Feliz cumpleaños.

jueves, 1 de abril de 2010

Días de semana santa.

Darme por vencida nunca ha ido conmigo.

Porque sí es verdad que quién me conoce bien (y quizá no tan bien) sabe que he tenido algún que otro momento en mi corta vida que casi me supera, pero es que hacer puenting sin cuerda aún no está al abasto del ser humano. En fin, la cosa es que ese es uno de los momentos que escribiría en mi libro de memorias. Ese, y unos cuantos más, pero sobretodo ese. Porque con los años y viéndolo desde una perspectiva mucho más altiva, me enorgullece haber pasado por ello, haberlo superado y encima con creces. Por eso, me veo capaz de decir que si en un momento como ese uno no se da por vencido, tiene terminantemente prohibido rendirse en ninguna otra situación.
Así que no pienso darme por vencida. Si realmente quiero hacer algo, me voy a desvivir por hacerlo, por mucho que tenga en mi contra. Ya no.

Pensar así me hace más fuerte. Pero igual que a mi, a ti también debería fortalecerte. Mírate, tú puedes, puedes con todo. No te pongas más escusas porque no es la solución.
Y si te estampas contra el muro, pues te estampas y ya está. Por muchos NO que obtengas, si buscas soluciones, las encuentras. Si yo nunca hubiese buscado una solución, quizá ahora no podría caminar. Por eso os digo siempre que lo mejor es lo que parece más difícil. Como me dice siempre Marta, si juegas con fuego, te quemas. Pues me quemo. Correré el riesgo. Todos deberíamos correr ese riesgo.
Te lo vuelvo a decir, ponte frente al espejo y cuando creas que no, díle a tu otro yo del cristal, PUEDO. Yeah. Entonces tu espejo te dirá: "-ok, puedes, pero deja ya de hacerte tirabuzones que me canso."

Qué cosas me da por pensar.


Ah sí, perdonen, se me olvidó desearles feliz Semana Santa para los que estos días tengan unos días de descanso. Y para los que no, escuchen la radio, que a mi me esta sirviendo de mucho. Pero cuidado, que al final acabas pensando que todas las canciones hablan de ti.
Y disfruten del sol. Y de las procesiones si os gustan y si no, pues colesterol, mucho colesterol de los postres de estos días. Y la familia unida. Y comed carne, que comer pescado en jueves o viernes santo, no sirve de nada. Pero shhh, que es un secreto.
Ah sí, y no os enganchéis a series online, aunque creáis que las vacaciones son para eso.

Otra cosa. Estos días están por aquí mis primas. Mis primas gemelas de origen catalán pero espíritu extremeño. Cuando se fueron a vivir allí, eran pequeñas. Ya hará unos 7 años y no recuerdan nada de aquí. Es alucinante cómo subirles al tren que yo cojo todos los días, para ellas es como subir a una atracción. Es que los que son de pueblo, son de pueblo.



Spotify - Estuve a punto de. - Miguel Bosé.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Hoy no lo dice Marta.

Hoy Marta no dice nada. Hoy las que hablan son Sara y Bea. Y ellas, igual que yo, son de las que piensan acerca de la razón de por qué el sexo masculino (casi todos, no voy a generalizar que luego ya se sabe, (http://sideralwish.blogspot.com/2009/09/partir-de-ahora_10.html por http://sideralwish.blogspot.com/2009/10/no-hay-que-generalizar.html ), te acaban atacando.

En fin, ya se sabe, cuando mujeres de mas o menos la misma edad (20-30 años), los mismos pensamientos, parecidos gustos y aficiones del mismo tipo, se juntan una noche de martes, hay el 95% de probabilidades de que acaben hablando o de tuperwares o de hombres (o más bien, profanando al sexo masculino).
La verdad es que alguna que otra conclusión salió de aquellas 4 horas. ¿Los hombres son simples o tienen un pensamiento simple? Ambas estaban seguras que los hombres son igual a simpleza. Son simples. Pero no simples de tontos si no de simples de comportamiento. ¿Qué no saben que para ciertas situaciones y ciertos momentos hay protocolos de qué hacer y cómo hacer las cosas?
Pues no, no lo saben. Y es de lógica. Vamos, eso creemos nosotras. En el fondo, los mas maduros del mundo acaban siendo los mas pequeños y nosotras nos acabamos sintiendo como las mamás de todos.

Y entonces es cuando llega una mente homosexual, a la que yo creía capaz de estar más en el lado femenino que masculino y va y dice: Es que los hombres somos así. Simples. Aceptarlo.

jueves, 18 de marzo de 2010

Como siempre.

Es jueves. (yuhu ¬¬).

Recuerdo las conversaciones que he mantenido estos últimos días. Me sorprendo y me abrumo. No entiendo nada. Como siempre, nunca entiendo nada cuando se trata de la falta de ruido, del no hablar por escrito, del reprimir las pasiones, de las pausas larguíssimas y las no tan largas, de la abstención de hablar. El silencio nunca fue especialmente mi amigo. Pero al parecer así tiene que ser.

Poetas. Dicen que son poetas y tan solo son demagogos de su tema. Hablan, hablan y hablan y curiosamente te convencen, te lo crees y te lo crees todo. Como siempre.
Marta siempre dice que por más palabras que puedas/quieras intentar transmitir/decir, ya sea con la cabeza bien firme o medio cabizbajo, se quedan en eso, palabras. Que sí, que pueden ser recuerdos, pero ya está. Que las palabras se las lleva el viento y que lo que realmente cuenta son tus actos y tus acciones; todo lo que haces y también todo lo que no.
Y lo haces. Tú lo haces. No sabes en realidad la razón, pero lo haces, te desplazas y vuelves a bajarte los pantalones por vigésima vez. Pones las cosas lo más fácil posible. Y nada. Nothing de nothing. Como siempre.

Es gracioso. Es cierto que las personas nos creemos que el camino más fácil siempre va a ser el más divertido cuando en realidad no es así. Aseguro que lo más complicado, lo que más te saque de tus casillas, lo que más te cueste y lo que menos puedas controlar, eso, será lo más fantástico, maravilloso e inquietante de todo el día, de toda la semana, de todo el mes o de toda tu vida.
Pero na'. La verdad es que te cagas. Porque es eso, no lo puedes controlar. Y te revienta.
Y ya ves, fíjate en los políticos. Me llama la atención que precisamente este tipo de cosas que pueden ocurrirte a ti y a mi, a nosotros y a todos vosotros, también les ocurre a ellos. A su manera, pero les ocurre. Que así no se solucionan las cosas. Que así no se soluciona nada señores. A ver que os pensáis.

Que inocentes que somos cuando nos creemos 3 palabras. Tres, cuatro o las que sean. y no entiendo nada. ¿Me lo explicas?

(Como siempre).

jueves, 11 de marzo de 2010

¿Y tú, de qué tienes miedo?

Cobardes. Eso es lo que somos las personas por naturaleza.
Y yo que el otro día creía que Marta era del otro grupo de personas, de los que no temen plantar cara pase lo que pase. Y no; me estubo comentando que por lo visto hay situaciones que le sacan de sus casillas y no es dueña de sus actos ni acciones. Por mucho que se esfuerce.

Me dice que lleva un par de semanas que tiene la cabeza en cualquier otro sitio menos en el que toca y que eso le ha hecho pensar. Pensar; uf, Marta pensando. Peligro.
Le he dicho que no se preocupe, que hay muchos tipos de cobardes. Que ella no lo es, que todos alguna que otra vez hemos sentido miedo. Miedo al aislamiento, miedo a la incomunicación, al rechazo, miedo a la mentira, miedo a que nos hagan daño o miedo al qué dirán.

Cuando somos pequeños tememos la separación de los padres. Bueno eso y al hombre del saco. En un rango de 0 a 4 años.
A partir de los 5 años nos creemos los reyes del mundo y de hecho lo somos. Somos los reyes de la clase, los reyes de tu casa, el rey de los abuelos; vamos, qué somos los reyes del mambo. Eso hasta los 7 años. Aquí ya empezamos a sentir miedo por otras cosas; se dice que a partir de los 7 años y hasta los 11 tenemos un miedo irrefrenable al ridículo. Al parecer es una época en que es necesario demostrar a tus "amigos" que ya no dependes de tus padres, que las cosas puedes hacerlas por tu mismo y que nadie te puede decir lo que tienes que hacer. Quieres ser aceptado. Eso sí, te caes al suelo y vas llorando a las faldas de tu mami. Pero a vistas de los demás, tú eres un machomen.
A partir de los 12 años (según a qué generación pertenezcas) hasta los 16 o 17 se siente miedo a la soledad. Aquí es cuando la adolescencia está en pleno apojeo; muchos pájaros en la cabeza y poca cordura. Pero eres feliz, vives feliz y sueñas en mil y una experiencias.
Cuando llegas a los 18 te entra el miedo a hacerte mayor, a las complicaciones, a los compromisos y a las obligaciones. A pesar de eso, los 18 son los 18 y te gusta sentirte un poquito más mayor.
Cumples los 19 y ya piensas, "coño, ha pasado un año desde que cumplí la mayoría de edad y ni me he enterado. A los 20 empiezas a darte cuenta que el paso del tiempo va más rápido de lo que tu creías.
A los 21 ya has asimilado tu posición, el sitio en el que estás y cómo te encuentras.
A los 22 has dado un repaso a tu (corta) vida en forma de recuerdos y te has puesto alguna que otra vez melancólica pensando en todo lo que has hecho. Lo que aún no sabes es todo lo que aún te queda por hacer.
A veces, a los 23 te pones a pensar en el futuro próximo y en el no al tan próximo, y te estresas. Te dicen que eres mayor pero tú te empeñas en decir que no, que aún eres una niña. Te sigue dando miedo hacerte mayor, que el tiempo pase deprisa, que no se pare en esos momentos que tú quieres y que no te de tiempo hacer todo lo que siempre soñaste.

Nos pasamos la vida temiendo ves a saber qué cosas extrañas cuando lo más fácil es enfrentarte a ellas, que por mucho que los años pasen, hay cosas con las que tienes que lidiar, por mucho que las rehuyas. Por eso siempre le digo a Marta que no hay que ser cobarde. Pero me dice que no puede remediarlo.

Marta tiene miedo de muchas y a muchas cosas.


¿Y tú, de qué tienes miedo?

martes, 9 de marzo de 2010

Colapso y postal.

8 de marzo. Día de pre primavera, de flores, de brisa, de pajarillos que cantan, de...NIEVE?
¿Qué ha pasado?
El cambio climático nos da una sacudida. Ya nos está bien. Nos lo merecemos. Colapso en Catalunya por no estar preparados. Desde el sábado que nos estaban avisando. Quien avisa no es traidor.
A pesar de las alarmas evacuando la universidad, los paraguas rotos tirados en las papeleras del paseo dirección al metro, el ferrocarril que parecía una lata de sardinas y mis botas nuevas chorreando, nadie me quita la postal blanca que hoy se ve desde mi ventana con el sol radiante.

Porque los lunes nevados, no son tan malos, ¿no?

sábado, 6 de marzo de 2010

Donesenxarxa.com.

Por casualidades de la vida, el viernes acabé en una concentración en las Escoles Velles de Sant Andreu de la Barca donde había unas 100 mujeres. Pocos días antes me habían informado que iban a incluir este blog en la web donesenxarxa.cat, un espacio en la red de carácter más bien feminista donde encontrar información sobre campañas, artículos de opinión, acerca de campañas a las que respaldar, blogs de mujeres, charlas, foros...., en fin, una web de reunión de mujeres que está funcionando bastante bien en Catalunya.
Mi primer pensamiento fue: ¿Por qué me incluyen a mi si mi blog no es feminista? que lo más feminista que he escrito ha sido algo como http://sideralwish.blogspot.com/2009/09/pero-no-ellos-siempre-diran-es-que-las.html.

Entender el feminismo como algo igual al machismo es hablar de extremos. El feminismo solo pide la igualdad entre hombre y mujeres. No dudo que haya muchas extremistas, però en aquella reunión me di cuenta que tan solo hacían por el progreso y la introducción de las mujeres a las nuevas tecnologías y eso me parece estupendo.
Fue gracioso ver como mujeres por encima de los 50 confesaban que se habían comprado por primera vez en su vida un portatil para ellas solas porque su hijo no les dejaba tocar el suyo.
Han hecho cursos, cómo hacerse un correo electrónico, como crear un blog, como comunicarse vía twitter....
Una hazaña fantástica, la verdad.
La única pega que me transmitieron fue que les gustaría que los cursos duraran más, porque con 3 días, su memoria no es capaz de retener y memorizar nada. que luego cuando se ponen frente al ordenador en sus casas, se estresan y se colapsan.
En fin, que eso. Donesenxarxa.com.

Más cosas que pasaron el viernes.
Cumpleaños de sus 25. Unos 25 que hay que celebrar no solo porque sean un cuarto de vida, sino porque este año, por primera vez, los celebró en Barcelona.

viernes, 5 de marzo de 2010

Marta.

Marta decía que aquel domingo no era digno de llamarse día. Porque los domingos, como todo el mundo sabe, son aburridos, desesperantes y algo amargos; sobretodo las tardes de domingo. Un domingo por la tarde es el peor momento de la semana. O miras una película de esas que dan por la tele super pastelonas, o lees un libro, o te tumbas en la habitación o miras por la ventana y esperas que el domingo se acabe o que llegue el momento de cenar. Sabes que te vas a ir a dormir y que el lunes va a empezar de nuevo la rutina diaria. Eso me desespera a mí, a tí y a Marta.

Pero cuando hace sol, ya es diferente. Todo es diferente. Cómo que el domingo se hace más largo, más alegre, de carácter más gozoso y satisfecho, como que más lleno y menos tedioso. Mucho menos molesto.
Cuando hace sol parece que miras con otros ojos por la ventana, vas al baño y el espejo te dice, "hoy es tu día". Y te sientes con fuerzas de hacerlo todo, aunque sea domingo, aunque sea final de semana. Hace sol, y eso es lo que importa.
Marta siempre dice que el sol le afecta en su estado anímico. Que los dias nublados y tristes perjudican seriamente la salud. Cuando llueve, ya es un tema a parte. Caminar bajo la lluvia sin paraguas es una de las cosas más gratificantes en días tormentosos y más si Marta se va a pasear por el centro de la ciudad. Que las gotas de lluvia choquen contra su rostro frente a una Plaza Catalunya tan bella, le hace pensar y serenarse, y eso, es estupendo. Caminar por la Gran Vía, echar un vistazo a todos los escaparates de la Calle Pelayo hasta llegar a la pizzeria, a la que como si de un rito se tratara, asiste todas las semanas en Plaza Universidad, es fantástico.

Pero bueno, hace sol, ese día hacía sol y eso era lo que realmente importaba. A Marta, eso de que haga sol le fascina. Se analiza y se descubre a si misma; porque los domingos con tardes soleadas le hacen a uno estar más radiante. Y cuando le llega la noche a ese domingo, no importa, porque ha sido un buen domingo, ha sido un excelente domingo que no querías que acabara nunca. Porque después del domingo, viene el lunes. Y ya sabéis que piensa Marta de los lunes.



A partir de ahora, los domingos con tardes soleadas deberían ser fiesta nacional. Y Marta, creo que está de acuerdo conmigo.

jueves, 4 de marzo de 2010

(Tansolohoras).

Así, de repente y casi sin avisar, llega el momento.

domingo, 28 de febrero de 2010

¿Y qué harías si hoy fuese el último día de tu vida?

Esta mañana me he levantado pensando en tan peculiar pregunta y a la vez tan común entre las personas. Y es curioso que un día como hoy, domingo soleado, yo, me haya hecho esa pregunta.

Imaginemos que va a acabar y que todos tus días te pasan por delante en forma de pequeñas fotografías, grandes recuerdos de fantásticos instantes que en algún momento de toda tu corta/larga vida fueron especiales. Es difícil saber pero creo que...

Volvería de nuevo a París, ni que solo fuese para comer un delicioso crep de plátano, chocolate y almendras; subiría a Montmartre corriendo por las escaleras paralelas al funicular y observaría la belleza del paisaje desde ahí arriba.
Me perdería por calles inhóspitas de la Barcelona antigua y les encontraría su esplendor o pasearía por callejuelas del raval donde toparte con todo lo que puedas imaginar.
Haría por arreglar mis pequeños problemas internos con la vida y luego me tomaría un cacaolat bien frío. Intentaría aclarar lo inaclarable y probaría de entender pidiendo un abrazo.
Le diría a todas aquellas personas que aprecio, que las quiero, que siempre las he querido y que probablemente siempre las querré.
Me mordería los labios pero nunca diría: "eso no lo debí hacer o eso no lo debí decir". Porque todo lo que pasa o ha pasado, ha sido por alguna razón.

Y es que si solo me quedara un día de vida, me gustaría que fuera uno que dejara huella en mi y no la simple imagen de una puerta blanca que se cierra.

viernes, 26 de febrero de 2010

Tornem-hi.

No, si el problema sóc jo. (confirmo el que vaig llegir l'altre dia a no se on).
És graciós quan les persones fan coses curioses; tan curioses que acaben molestant, fins i tot poden emprenyar a un mateix. I es que com pot ser que siguem d'aquesta manera ( i parlo en 1a persona del plural perquè jo m'hi incloc dins).
A vegades fem les coses sense saber el perquè. Ni sabem per què les sentim, ni per què reaccionem d'una manera o d'un altre, ni per què diem segons quines coses. Però les diem i les comentem. I realment no volem. Però ho fem. I ens enfadem. I molt.
Fa una estona he estat parlant amb el meu tiet i sense adonar-me, el to de la meva veu era excessiu, l'expressió de la meva cara probablement era d'indignació amb mi mateixa i el final de cada frase venia acompanyat amb una gesticulació corporal estranya. M'accelero. I no m'he adonat i el cas es que en cap moment he volgut estar així.
I és el que dic. Que a vegades fem coses que no volem fer però les fem. Ni les volem fer, ni les volem sentir, ni les volem dir, ni tan sols les volem pensar per després somiar en elles. Però hi han coses que no es poden evitar. I algun dia solucionaré el meu problema.

Mentrestant;
Jo de gran vull ser com el meu tiet. I poder explicar com es contracta una companyia de telèfons quan llogues un pis als Estats Units i saber que els xinus de New York després de cada plat, somriuen i diuen enjoy. M'encanta.

lunes, 22 de febrero de 2010

Fin de semana algo peculiar de primeras veces.


Tengo que reconocer que este ha sido un fin de semana algo peculiar donde se ha podido observar en las noches de la provincia que la fauna y flora barcelonesa brilla en todo su esplendor.
Han habido primeras veces. El viernes fue my first time con zapatos altos, con tacones algo característicos, con unos botines verdes y morados. Vamos, muy yo. Y digo mi primera vez porque sí, a mis 23 años, nunca había tenido unos zapatos que me alzaran algo más de 2 centímetros y qué queréis que os diga, como que una se siente más femenina y estilizada.
Ha sido la primera vez que en un chino nos hacen pagar todo junto y en el que estamos 1 hora y casi 30 minutos para que, después de discutir largo rato, consigamos que nos cobren por separado a cada uno. Los chinos ya no son lo que eran.
Primera vez que me han dicho "que soy muy porno". Sí, sí, así mismo. Y aún no entiendo muy bien el porqué. Pero nunca antes me lo habían dicho. Y lo más curioso de todo ha sido que era una chica la que lo soltaba por su boca y no un machomen. Pero así, de repente y sin mirarme a los ojos. Eso sí, con unas copitas de más. La verdad, y a pesar de, una muy buena primera impresión. ¡Me encantaron! Las amigas de mi amiga, son mis amigas.
También la primera vez que he seguido hasta el final, he visto como es que se acabe la fiesta en una discoteca. La verdad, algo decepcionada. Pensaba que el cierre, sería más espectacular y... no. Sólo ha sido un "enciendan luces y apaguen música."

Y cosas a resaltar... mi nuevo libro, regalo de Fran y Elena. Perfecto para independizarme: "mira cómo se hace. 500 cosas que debes saber". Es un libro muy, muy, muy original, completo y llamativo. Digamos que es la vida explicada paso a paso. Ya mostraré algunas páginas.
Y mi otro regalo: "monstruillos de ganchillo". Zombies, robots, ninjas y muchos bichos más! A ver que tal se me da la experiencia del aprendizaje de las agujas. Mi primera creación será un Chuthlu para Fran!
Y domingo de comida de M Carmen Alaminos. Lo mejor: el flan de queso.
ñAMnAM!

martes, 16 de febrero de 2010

Y ya está.


Un día después de mi 23 cumpleaños una no se siente ni más mayor, ni más madura, ni con más arrugas, ni más cansada, ni más vieja. Simplemente, con un año más. Y ya está.






*Igual y un poquito más buena. Mi tlf. - hamburguesa se me quiere comer.

domingo, 14 de febrero de 2010

SV'sD

Lo único que me gusta del día de San Valentín, es que al día siguiente es mi cumpleaños.

sábado, 6 de febrero de 2010

Fácil de querer.

Y es que es adorable y aún y así, llega a decirme que no le conozco. Que él es mas borde y más serio. Pero en realidad no me lo creo. Es solo que a veces la situación le hace ser así. Que todo eso es mentira. Es divertido y me hace reír siempre. Me lleva, me trae. Que a pesar de los 6/7 años compartidos, todavía me hace falta de pinzas y cuerda para sacarle las cosas. Aquarius limón y gasolinera. Hablamos. De lo bueno, de lo malo, de lo muy bueno y de lo muy malo también. De mis peleas mentales y de sus miedos. También de los míos. De lo complicado que es todo con algunos y de lo fácil que es entre nosotros dos. De lo poco que me cuesta revelarle mis cosas y de lo mucho que le cuesta decirme a él las suyas. De su coche. Del poco espacio que hay para según que cosas. Y de lo cómodo que es para otras. Sus gafas rojas le quedan genial y que operarse no es la solución. Aunque él siga empeñado. Abrazarnos. Decirnos que nos queremos. Decirle que es mi rubio preferido. Y que aunque no lo crea, es muy fácil de querer. Porque ambos molamos.

viernes, 5 de febrero de 2010

nightmare or dream?

¿Tú sabes cuando tienes un pensamiento en mente continuamente presente? ¿Eso por qué es? Es que últimamente me está sucediendo y creo que tengo hasta sueños/pesadillas con ello.
¡Coño!, me pone muy nerviosa esto, qué quieres que te diga. Y es que en realidad el problema es de uno mismo o más bien el problema es uno mismo. Como lo digo.
¿Esto que es? ¿Cómo una carta no racional de mi misma que recibo cada noche? ¿O cómo va esto? Y lo mejor/peor de todo no es que el sueño se repita en sí, sino que lo que se repite son las personas que en él salen, y es una cosa que la verdad, me revienta.

viernes, 29 de enero de 2010

Chocolateboy14.

Es increíble la complicidad que puede haber entre dos personas que se ven de mucho en mucho.
Y es que es genial lo bien que me lo paso y lo a gusto que estoy cada vez que quedo con mi amigo Marc (sí, sí, el Blanco Reniu, el de que desde que soy consciente de mis recuerdos, ansiaba con Japón).
Hablamos de muchísimas cosas hasta el punto de ponernos algo melancólicos al recordar gentes, momentos, historias... Además, como por regla general acostumbramos a vernos una vez al año (muy a mi pesar), nos ponemos al día de nuestras vidas y nos explicamos qué hemos hecho y qué nos ha pasado desde la última vez que nos encontramos.

Mientras comemos un buen plato de paella con una botella de agua (porque sí, ambos pedimos agua) en la mesa para dos del restaurante, se me queda mirando, entablamos conversaciones varias y hablamos de viejos conocidos. Me dice que solo las personas con buen fondo piensan como yo, aquellas que no son calculadoras, ni malpensadas, y mucho menos retorcidas; aquellas que siguen con la cabezonería y testarudez de reunirse con las personas que han sido importantes en tu vida pero que por X razón y con el paso de los años te han dado la espalda alguna que otra vez.
Nos damos cuenta que los dos nos hemos encontrado en esa misma situación, ambos hemos querido hablar, ver u oír a personas que marcaron una época en tu vida.
Entonces es cuando nos preguntamos que para qué; ¿realmente es necesario? la verdad es que no hace falta ninguna finalidad ni propósito, nos miramos y él entiende el porqué. Simplemente porque sí, porque hay etapas que necesitan ser cerradas, necesitan el punto y final, o simplemente necesitan el punto. Pero nos cuesta, porque aunque uno es más visceral que el otro, hay cosas que no se pueden evitar.

Nos damos cuenta que hemos crecido, que nos hemos hecho mayores y que ya no somos aquellos niños que salen en la foto del álbum del facebook "pekes" o "temps era temps..." que un día alguien publicó.
Es curioso como han transcurrido nuestras vidas; hemos viajado, hemos vivido nuevas experiencias, hemos conocido muchas personas y quizá (y digo quizá porque a veces podemos dudarlo), hemos crecido como personas madurando y tomando un carácter algo más adulto.
Pero nos juntamos, hablamos y vemos que todos los formalismos que quizá hemos obtenido en nuestros quehaceres diarios, entre nosotros desaparecen; la conversación toma un ritmo y coge un registro divertido, confidencial, íntimo, y ambos comprendemos todo lo que compartimos.
Nos reímos como si fuéramos dos amigos en el patio de colegio, jugamos, nos halagamos y luego decimos que esto hay que repetirlo y que tenemos que reunirnos más frecuentemente.

Cuando Marc se va, me quedo mirándolo de espaldas cómo se aleja con su traje de corbata y pantalón, con su bolso y su abrigo entallado y elegante; se quita los guantes y entra al ascensor del parking. Me doy cuenta de lo que hemos cambiado y eso me encanta porque aunque uno quiera solucionar conflictos internacionales con los japoneses y la otra quiera recuperar la sonrisa de muchas personas, siempre nos quedarán aquellos ratos en que nos vemos y en los que demostramos que en el fondo, las personas no cambiamos tanto.

jueves, 28 de enero de 2010

¡Caramba!

Es curioso como puede llegar a ser tan complicado llamar a un timbre, coño!

miércoles, 27 de enero de 2010

Amenazas de fesibú.

Dice mi padre que como cuando llegue esta tarde de trabajar, mi hermano no se haya duchado, que lo va a poner en el feisbú para que todo el mundo se entere.

martes, 26 de enero de 2010

Diálogos de silla y sillón.

Y vamos a hablar de las cosas realmente serias:

- ¿Porque usted, cuantas veces se lava los dientes al día?
Hombre, pues yo...,(silencio tensional), pa' que te voy a mentir, pues una vez y eso, cuando lo hago, que a veces, ninguna.
- Bueno, ¿y que piensa hacer al respecto a partir de ahora?
Hombre, pues yo..., ej'que pa que te voy a mentir señorita, pues yo quiero lavármelos pero nunca tengo tiempo.
- ¿Pero no me ha dicho usted que está en paro ahora mismo?
(Ha notado que le he pillado la escusa)... Ya, pero ej'que yo tengo muchas cosas que hacer, sabes?
- Bueno, nadie ha dicho que usted tenga que dejarlas de hacer, pero sabe que...
No, no, si yo se que me he dejao' mucho la boca en estos últimos años y no tendría que habérmela dejado tanto porque ves, con la vista, yo me operé y luego pos uno se lava las manos porque ya no tiene que preocuparse y no ahora, que mira como estoy con... ¿Cuantas caries me has dicho que tengo?
- Honorio, le he dicho que con esas dos últimas son un total de 9 caries.
Coño!, nueve... joder.., pero esto me va costar una pasta, no? Porque aquí, cuanto os pagan?
- Honorio, aquí no nos pagan nada, somos estudiantes.
Ahh.., pero...., y... tú cuanto hace que estás aquí estudiando.
- Cuatro años.
Ah bueno, entonces me puedo fiar de ti.

domingo, 24 de enero de 2010

Quién sabe si algun dia....

Teniendo en cuenta que el otro día descubrí que un amigo lee de vez en cuando mi blog (no por méritos propios si no porque me lo dijo como respuesta a una cita fallida de viernes por la tarde/noche), creo que voy a tener que proponerme hacer algo que hace mucho tiempo que pienso pero que nunca me he atrevido a hacer. Igual y esto va a ser la gota que colma el vaso.
Y digo que voy a empezar a proponérmelo porque si alguien que viaja, estudia y tiene amores por tierras japonesas dice que le gustan estas líneas que escribo, es señal de que lo lee y si lo lee, habrá que darle algo más que simples líneas, no? Un poco más de divertimento, algo más visual y menos cansino de leer en tardes de domingo sin nada que hacer. Además, siempre tenemos añadido el factor tiempo...; que sí, unas líneas están muy bien para saber como le están yendo estos últimos tiempos a una persona que conoces desde los tres años, pero hay veces que una imagen visual vale más que 10 líneas de aventuras/aventuritas diarias.

Tengo que reconocer que es algo que admiro, y lo admiro de verdad porque hay que tener huevos para hacerlo, no es tan simple y fácil como a primera vista pueda parecer (os lo digo porque mis cientos de tomas falsas que en alguna ocasión he tenido que hacer, el no poder mirar directamnete a un objetivo durante más de 3 segundos, el no poder estar hablándole a un objeto inanimado por el hecho de que te sientes inútil, en fin.., todas esas cosas que hacen que hablarle a una cámara de vídeo, sea algo incómodo).

La cosa es que sí, igual y un día de estos me lanzo a ese mundillo de los vídeosblogs y aunque durante mucho tiempo pensé que no lo haría por aquello de la actitud narcisista, de vez en cuando no iría mal subir el ego de uno mismo. Además, más bien creo que es como una especie de proyectillo y que, como recompensa te da buenos resultados; conocerse uno mismo y verse como te ven los demás desde el otro lado, no va mal del todo.

Quien sabe. A ver que tal se me da. Siempre me gustaron estas cosas de las nuevas tecnologías.

martes, 19 de enero de 2010

Gracioso.

Es muy cómico cuando oyes que tu madre está hablando con tu tía por teléfono y solo encuentran contras para decir que la Clara, un día después de que le hayan dicho que puede esquiar después de 10 años, no esquíe.

Y entonces ha sido cuando he oído gritar a mi madre desde la otra punta de la casa:

"¿Tú te crees Mailo que yo, con 23 años que tiene la niña, le voy a poder decir lo que puede hacer y lo que no?"


...que si no me voy a poder poner las botas, que no voy a encontrar las adecuadas para mi, que si yo me caigo es 3 veces peor que cualquier otra persona, que hay muchos locos por las pistas de sky, que me va a ser difícil llegar a las pistas, que el tren hasta Ripoll no va muy fino, que si son 2 horas..... pamplinas!

Ya se sabe lo cabezona que soy, y todo esto, tengo que verlo yo con mis propios ojos (o con moratones en el culo).

domingo, 17 de enero de 2010

sábado, 9 de enero de 2010

Casi cuatro.

¿Tú sabes cuando tienes un amigo que es muy amigo, muy amigo, muy amigo... tan amigo que estás segura que haría cualquier cosa por ti? Bueno, pues ese amigo existe. Y es curioso como y cuando te das cuenta porque pueden pasar muchas cosas a lo largo del tiempo y sin percatarte han pasado casi 4 años. ¿Cuatro ya? Pues sí. Casi.

Los años pasan, nuevos trabajos, nuevos años de carrera, nuevas experiencias, nuevos amores, nueva vida al fin y al cabo, pero por suerte parece que algunas amistades persisten; y siguen ahí aunque la duración de una llamada sea más corta que antes, aunque la frecuencia de mensajes vía teléfono móvil sea menor que años atrás, aunque los caminos de cada uno hayan tomado direcciones un pelín distintas....pero...., se sabe, siempre se sabe; esos caminos se cruzan una, dos o tres veces al mes, siempre dependiendo de las fechas en que uno se encuentre y del tiempo del que se disponga.

Hay amigos que te han hecho llorar un millón de veces, pero que si multiplicas ese millón de veces que te han hecho llorar por 3, obtendrás un resultado, el resultado de las veces que te han hecho sonreír.
Y los quieres, es inevitable; los quieres un montón, los estimas y aprecias y ese sentimiento hace que te sientas un poquito más llena por dentro porque te das cuenta que, exactamente todo lo que tu harías por ellos, ellos también lo harían por ti.

Las reflexiones en noches tan extremadamente frías nunca fueron buenas pero en una noche helada del 8 de enero del 2010, alguien me dejó sin palabras con solo un cartoncito amarillo con unas letras en negro.
Que hicieran eso por mi, que se acordaran de aquello para mi y que me dieran la oportunidad de vivir ese espectacular momento y más con ellos, hace que sin duda, me quite el sombrero.

Y encima si te das cuenta de que los reyes italianos se han acordado de ti solo conociéndote de apenas algunos meses (porque sí, son solo unos meses, 7 u 8... o ni eso), pues ya hace de toda la velada, una noche redonda.

Porque hay amigos, que con mucho o con poco son especiales y ellos, tanto uno como el otro, lo son.

viernes, 8 de enero de 2010

Este año va en serio.

Tengo que hacer dieta. O dieta o ir cada día al gimnasio porque esto no puede ser. Quiero perder al menos 6 quilos y que el wiifit me deje de decir que soy ideal-sobrepeso.

martes, 5 de enero de 2010

Ésta es una minicartadereyes.

Queridos reyes magos,

Como cada año creo que hoy me toca escribir la carta de reyes que, para variar, ya va muy, muy tarde. Pero en fin, este año no voy a molestaros demasiado así que tampoco incumbe mucho el momento en que escriba la carta porque no voy a pedir absolutamente nada.

Y no lo voy a hacer porque este 2009 me ha dado muchísimas cosas, muchísimas de las que pedí en la pasada carta y muchas otras que ni siquiera las mencioné. Me dio mucha salud, mucha amistad y mucho amor de todos los que quiero.
Me trajisteis momentos de felicidad y algo de tristeza pero que al fin y al cabo, todos tienen una recompensilla y si bien no, aunque no tuve un verano como se debe, mi final de septiembre fue espectacular con mi vuelta a París y mis paseos por Roma. Además, mi principio de noviembre muchos ya pueden envidiarlo!

Mirad, creo que tan solo os voy a pedir una cosa, se que antes dije que no lo haría, pero no es para mi; este año solo pido una beca, pero no una normal y corriente, nono, una señora beca, una que permita abrir puertas, que de un futuro próspero, con la que se consiga una vida que siempre se ha querido y nunca se ha podido tener, en fin, una beca para venir a terminar los estudios aquí, a España, a Barcelona... que ya va siendo hora que el señorito esté a mi lado, hombre! ;)
Eso, un poquito de consideración para el wey.
Así que ya sabéis, antes de finales de febrero, quiero a alguien ocupando mi lado izquierdo de la cama de Molins, por favor.

Y ahora, solo quiero daros las gracias por permitir que este 2009 haya dado salud a todos los míos, que mi hermano haya empezado con buen pie la universidad (esperemos que así siga), que la crisis no haya conseguido cerrar la empresa familiar, que aunque hayan mil peleas en casa, hayan habido mil y una reconciliaciones incluso aquella que os pedí el año pasado, y que parecía imposible, hasta esa, me la habéis dado (no sin algún desperfecto).
Gracias de verdad.

Y...nada más sus majestades; que les vaya bien, que tengan buena noche y todas esas típicas cosas.


Muchos besos.
Clara