lunes, 27 de octubre de 2014

Pastelitos y flores.

Trabajar bien, no cuesta tanto. Y sonreir a los pacientes, tampoco es tan dificil. Miles de veces he oído eso que los dentistas son bordes, serios, aburridos, con mala leche y con cara de "lo que voy a hacerte va a dolerte un huevo y medio".

¿¡Por qué!?
No lo entiendo. En serio.

Pero..., sabéis qué!.... los dentistas (al menos, los dentistas como yo) ni somos malos, ni tenemos la intención de dar miedo, y mucho menos queremos hacer daño a nadie. La anestesia se inventó para algo, no? Pues eso. Y en serio, sólo es el pinchacito. Un mal menor para evitar un mal mayor. 

Os aseguro que es tremendamente distinto pinchar sonriéndole al paciente que con cara de mala leche.
¿Tan difícil es sonreir?
Me gusta llevarme bien con mis pacientes. Crear ese vínculo que creo indispensable para el trato con el odontólogo. Alguna vez he escuchado que hay que marcar ciertos límites. Tú eres el doctor y ellos los pacientes, dicen. 
Estoy de acuerdo. No lo discuto. Pero simpatizar con ellos, tratar temas que no tienen que ver directamente con su boca, "crear la conexión", lo llamo yo. ¿Desde cuando es incompatible ser simpática y trabajar bien? Desde nunca.


Tengo que admitir que el otro día, cuando me di cuenta que una paciente había cogído hora sólo para preguntarme cómo estoy, para decirme lo bien que le está yendo el tratamiento que le hice y para traerme una planta....me hizo muchisima ilusión. Supongo yo que eso quiere decir que tampoco hago las cosas tan mal. 
Aunque fué mejor el momento en que uno de mis pacientes a primera hora de la mañana, me trajo el desayuno.. Ricos y deliciosos pastelitos de chocolate. Aix...! Si es que son un amor!

Y a todo esto....¿Sabéis lo más curioso? Mientras le realizaba una higiene, me dijo: "el otro día, cuando leía e iba de blog en blog por internet, acabé en Cosas de una Tía Curiosa, y me di cuenta que eras tú. Te pasan muchas cosas a ti, no?". Imaginaros cual fué mi cara. Vergüenza máxima. Luego, pensándolo mejor, me hizo hasta ilusión. #Pacientesque descubren tu blog sin que tú lo sepas. Yey. 

No se, es guay.