jueves, 5 de noviembre de 2009

Escribiendo desde el hospital.

Tumbada en mi cama de la habitación 519, en el Hospital Sant Joan de Déu con mi madre sentada en el sofá y Gerardo chingando la madre todo el tiempo con que ponga la nueva temporada de House, aquí escribo, esperando, una hora antes de que me operen.

Tengo hambre, tengo hambre, tengo hambre, mucha hambre y quiero chocolate y patatas fritas y no me dejan comer ni beber nada de nada y me estoy mareando.

La anestesista me ha dicho que hasta las 4 y media largas no entro a quirófano y quiero entrar ya de una vez! Al final me duermen la mitad. A mi eso de la epidural parece que no me afecta.



Parece que después de 10 años, la leyenda de la niña que sobrevivió a la caída de un séptimo piso, aún perdura...

1 comentario:

alea dijo...

sigo viendote, leyendote y sigo impresionandome. y el final me ha rayado la coraza del corazon...